No voy a entrar a analizar sobre la conveniencia o no de que en Badajoz se celebre el Día de las Fuerzas Armadas, aunque no voy a negar que desde mi posición personal preferiría que no se celebrase ningún homenaje a ninguna fuerza, (y en todo caso preferiría que fueran "DESARMADAS").
Sin embargo, la realidad es que este fin de semana el referido día va a ocupar todo el fin de semana en nuestra ciudad. Ahora bien, en unos momentos donde la contención del gasto es la norma recomendada desde todas las esferas sociales y políticas de nuestro país, la realidad es que en nuestra ciudad se va a llevar a cabo un DESPILFARRO ECONÓMICO sin precedente, porque los actos previstos suponen una "fastuosidad inmoral".
En Badajoz hay ya más de 17.000 parados, pero esto no parece ser un elemento de peso para las autoridades a la hora de reflexionar . Más bien parece ser un elemento molesto sobre el que, ni las autoridades municipales ni las autonómicas, desean recordar. Tanto el gobierno municipal como el autonómico prefieren ignorar esa cifra, convencidos de que si no se habla de los parados parece que éstos no existen.
Es más, las autoridades han preferido desarrollar la máxima romana (pan y circo) a la hora de elaborar el presupuesto con el que celebrar el Día de las Fuerzas Armadas.
¿Es acaso moral que, ignorando la realidad de esos 17.000 parados, el Ayuntamiento de Badajoz vaya a celebrar un vino de honor en el Palacio de Congresos y para el mismo haya aprobado un gasto de 19.620 euros? (Más de 3.000.000 de las antiguas pesetas).
Estamos viendo en el debate nacional que, para hacer frente a la manida crisis económica, se anuncian recortes económicos a funcionarios, pensionistas, dependientes... etc Vemos como, diputados y senadores anuncian, (como efectismo mediático) un recorte de sus sueldos. Es decir se impone un discurso de Contención del Gasto Público, pero paradógicamente en nuestra ciudad no solo no se contiene el Gasto sino que se despilfarra sin contención los dineros públicos.
Pasado los actos referidos daremos en este blog los datos detallados del gasto total, que se ha realizado desde el Ayuntamiento sin entrar en el gasto de otras administraciones ( autonómica y estatal) es decir: la suma total de horas extraordinarias para adecentar la ciudad ( aunque durante tres años la ciudad ha estado sucia como nunca), los gastos en "adecentamiento" en pinturas de calzadas, la decoración de espacios verdes mediante flores y árboles, (aunque durante tres años Badajoz ha sido un erial), los gastos en comilonas, vinos de honor y más prebendas....
Pero no quiero olvidar que la forma en que se justifica este despilfarro es, no solo por la presencia de las Fuerzas Armadas, sino también, y sobre todo, por la presencia de los Reyes de España en nuestra ciudad. Aunque me temo que ninguna autoridad municipal arrancará a la familia real el compromiso de reducir sus ingresos públicos, (sugiero una reducción del 20%) para ser equitativos con el resto de recortes del gasto público.
Pero además hay algo que aún me escandaliza más. Me refiero al Bando cesarista que, más propio de Nerón que de un alcalde democrático, ha realizado el Alcalde de Badajoz, en el cual, en su artículo 3 apartado a) dice, sin rubor ninguno, que se procederá a retirar pancartas, carteles, banderas o escritos que sean "inadecuados e improcedentes" en relación con la conmemoración que se celebra.
Es decir, la referida norma se impone sobre los derechos constitucionales de libertad de expresión y de libre difusión de ideas. Pero además ¿quién dirime lo que se considera "inadecuado e improcedente"?.
Y todo ello para evitar que los que somos republicanos podamos mostrarnos públicamente este fin de semana como tales. Esto solo es una muestra más de cómo, poco a poco, día a día, con actitudes casi "desapercibidas", se conculcan y se erosionan los derechos democráticos. Eso sí, se hace de forma que quienes osen protestar por tales medidas aparezcamos ante la opinión pública como unos descerebrados, por ser precisamente minoritarios. ¡ Como si el respeto a las minorías no fuera el cimiento en el que se asienta toda democracia!.
