viernes, 25 de junio de 2010

Aunque pacífica, pero Revolución ya

A continuación una nueva reflexión del compañero Joaquín Carrasco:

Si bien es verdad que plantando cara, a estas alturas de la película, a la UE y EE UU y, sobre todo, a quienes les apoyan; los mercados, el FMI, la OMC, BM, etc., quienes, como ya dijimos en esta sección, no han sido votados, el bloqueo estaría servido, cual “senda que han seguido, los pocos (en este caso; países) que en el mundo han sido.”

Adoptar esa iniciativa de confrontación, sin revolución, solo es posible, por parte de un dirigente político, si es demandada por la sociedad. Por una ciudadanía concienciada, semejante a como lo éramos, la población española, hasta el año 1982; año de la victoria del PSOE.

¿Qué nos ha pasado? Lo que sea no ha sido casual sin causal y está corroyendo nuestra democracia. Conformismo, sumisión e individualismo. Esta población que salió de la dictadura, era austera y solidaria. Hoy anda adormecida, hipnotizada, idiotizada, saturada, desbordada: por programas y series divertidas; campeonatos y ligas varias; noticias –que no informaciones- irrelevantes; consumismo, también, sexual; supuestos mensajeros de paz que hacen el caldo gordo al conservadurismo; asistencialismo, que no justicia, etc, etc.

Con todas estas opciones nos entregamos al debate, alimentado por tertulianos todólogos, al servicio del sistema, sobre si son galgos o son podencos; todos y todas con razones, y queriendo llevar la razón, mientras los mercados no cesan de afanar.

Con nuestras riquezas autóctonas esquilmadas e inundadas de productos “mas competitivos”; es decir, subvencionados y/o del tercer mundo, no sería fácil la insumisión a los mercados, pero tampoco lo tienen fácil otros países que, como Cuba, con un PIB 45.510 millones de dólares; el español es de 1.456.103 millones de euros (Fuente: Wikipedia), soportan con dignidad el largo bloqueo, a pesar de que tras la caída del muro de Berlín perdiera los acuerdos comerciales y financieros, con todos los países del bloque Comunista, que Ernesto Guevara; el Che, consiguiera en 1960, tras el boicot del bloque occidental; imperialista. Por lo que a finales de 1991, con la pérdida de casi 5 mil millones de dólares que el gobierno de la URSS proveía a Cuba como ayuda, con exportaciones garantizadas del azúcar y la obtención de petróleo barato, la economía de Cuba sufrió una crisis, que la deja paralizada con unos pocos productos y con muy pocos compradores. Y ahí se mantiene, de pie, todo un pueblo. Eso no se consigue por la fuerza y lo saben muy bien los demagogos voceros del gobierno imperialista USA y de los mercados. Es verdad que a partir de la llegada de Hugo Chávez al poder en Venezuela y el nacimiento del ALBA, se ha producido un despegue de la economía nacional.

A nos tampoco nos faltarían apoyos, si los buscásemos.

2 comentarios:

Joaquín Carrasco dijo...

Decimos los creyentes; “Dios aprieta, pero no ahoga.” Y las personas cubanas no merecen eso, pues incluso quienes les dirigen, aunque a quienes les cueste creerlo, también son hijos de Dios. Por cierto, a quien no le agradan estas cosas:
“Que los montes traigan paz,/ y los collados justicia;/ que él defienda a los humildes del pueblo,/ socorra a los hijos del pobre/ y quebrante al explotador. (Salmo 71 2ª estrofa)

Alfonso Vázquez dijo...

No quiero ayuda gringa, pero me dan más miedo los rusos.

Prefiero seguir bajo control imperialista que ser salvado por una revolución bolchevique

salud y libertad